Mantenimiento: Se recomienda limpiar con agua, jabón y secar al viento o con paño limpio. No utilizar liquidos corrosivos como alcohol, cloro, etc.
Almacenamiento: Se recomienda almacenar en lugares que no estén expuestos a la luz solar, mantener en su bolsa y libre de exposición a riesgos químicos, físicos (humedad, polvo, cambios bruscos de temperatura y altas o bajas temperaturas) y biológicos.